Découvrez les secrets de l´Atzúbia et de Forna sur le nouvel itinéraire urbain
13 janvier 2025

L’Atzúbia y Forna presentan una nueva ruta urbana que invita a los visitantes a explorar los rincones más emblemáticos de estas localidades y descubrir su fascinante historia a través de cada rincón.
Esta nueva ruta urbana, diseñada para todos los públicos, permite a los visitantes adentrarse en la historia de l’Atzúbia y Forna a través de sus calles, sus monumentos históricos y sus rincones más auténticos. Desde el imponente castillo medieval hasta la antigua almazara, cada paso será un viaje en el tiempo que nos transportará a épocas pasadas.
En cada núcleo de población se ha instalado un poste informativo para que los visitantes puedan realizar una ruta urbana en la cual recorren 8 puntos en l’Atzúbia y 6 en Forna. Se trata de un proyecto de la Mancomunidad de Turismo de Pego i Les Valls, ya que también se han señalizado las rutas de Alpatró y Benialí (en la Vall de Gallinera), Pego, la Vall d’Ebo y la Vall d’Alcalà.
Todas las rutas, tanto urbanas, de senderismo como de ciclismo, se pueden consultar en la web turística https://www.pegoilesvalls.es/es/rutas, así como en la app se pueden seguir las sendas fácilmente ya que están geolocalizadas por GPS.
Desde el aparcamiento llegamos a la cruz de piedra, un cruce de caminos, y seguimos por la calle Principal, donde encontramos un edificio histórico que fue casa, prisión y almazara. La plaza redonda, que era una era para secar cereal, y el antiguo Ayuntamiento son puntos destacados. También podemos ver la iglesia de San Vicente Ferrer, construida en el siglo XVIII, y la Casa Abadía. Al bajar por la calle de la Font, encontramos la fuente y lavadero del pueblo. Desde la plaza del Raval se accede por un túnel al antiguo puente que atraviesa un barranco. La ruta termina en la “parada de las posadas” en la carretera CV-700, donde se construyeron posadas para viajeros.
Forna ha mantenido su patrimonio arquitectónico y cultural, conservando el encanto de una alquería morisca. La ruta comienza en un parking donde se encuentran antiguas muelas de almazara. Luego, pasamos por la Casa de la Rueda, donde vivía el maestro de los carros. Llegamos a la Iglesia de San Bernardo Abad del siglo XVI, que también fue mercado y escuela. El antiguo ayuntamiento y cárcel están al lado. La Casa de la Baronía, antigua casa del señor feudal, y la Casa Abadía, que cubre una fuente, son otros puntos de interés. Al final de la plaza, encontramos el Lavadero, que curiosamente está dentro del pueblo. La ruta continúa por la encantadora calle Perera, empedrada y llena de flores, con vistas al castillo, final del recorrido.